¿Has notado que todas las piscinas de clubes tienen una ducha para antes y después de salir del agua? ¿Sabes a qué se debe? Las duchas para piscinas son utilizadas, en especial, en clubes sociales en los que muchas personas ingresan constantemente al agua, por lo que se les exige que, antes de ingresar a la piscina, pasen por la ducha para eliminar cualquier bacteria o restos de cloro u otras suciedades que pueda llegar a pegarse al cuerpo.

Si quieres tener una ducha para piscina, es una excelente opción, ya que ayuda a mantener el agua limpia. Hay diferentes tipos de duchas para piscinas que puedes elegir según tus necesidades o preferencias.

¿Qué debo tener en cuenta antes de comprar una ducha para piscina?

Si ya decidiste que quieres comprar una ducha para piscina, deberás poner en la balanza diferentes aspectos para que no te lleves una sorpresa al momento de la instalación.

Material: Puedes encontrar duchas de piscinas de acero inoxidable, resina o fabricadas en PVC (vinilo). Te recomendamos que elijas las de acero inoxidable, ya que pueden durar mucho más tiempo que las otras.

Colocación: Las duchas de piscinas pueden requerir de una instalación previa, o no, dependiendo del tipo y material del que estén hechas. Si tienes que instalar la ducha, deberás encontrar un espacio cerca de una toma de agua. Además, estas duchas para piscinas son fijas, por lo que deberás hacer los cálculos para que todo salga tal como lo planeado.

Ducha de agua caliente: Generalmente, las duchas para piscinas largan solamente agua fría, ya que solo hay un tipo de ducha que funciona con agua caliente.

Tipos de duchas para piscinas

  • Duchas tradicionales: Son aquellas que más se utilizan en los clubes públicos o privados. Si bien se necesita invertir en la obra de instalación, este proceso es bastante sencillo. Su estructura se basa en un grifo sobre una base de cemento o madera, por lo que son las más económicas. Al estar conectadas directamente al grifo, sale únicamente agua fría. Generalmente son de acero inoxidable.

  • Duchas solares: Funciona mediante un tanque de agua de entre 20 a 40 litros aproximadamente. Al ser agua depositada, podrás tomarte duchas de agua fría y caliente. Si quieres usar la primera, el agua saldrá directamente de la conexión de la red, mientras que, si optas por la segunda, te bañarás con el agua almacenada que ha sido calentada por el sol.

  • Duchas portátiles: Este tipo de duchas están fabricadas de aluminio o acero y son desmontables, es decir, no se necesita una instalación. Solo debes colocar el pincho o trípode directamente a la manguera de riego y podrás regularla hasta los 2 metros, facilitando su traslado.

  • Duchas escocesas: Estas duchas son las más exclusivas, ya que es una estructura que consta de varios grifos a lo largo de la cañería, lo que permite que el agua llegue a todas las partes del cuerpo sin un mayor esfuerzo.

 

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